Crema catalana, París y ¡¡feliz día de la madre!!

Como prometí en otro post, os iba a enseñar un poquito del viaje que hice a París. La verdad que es un lugar con un encanto especial y en cuanto a repostería es absolutamente fantástico. Me encanto el barrio de  la Marais con todas esas tiendecillas especializadas en un solo producto y tan bonitas. Sorprende bastante el cuidado y la importancia que le dan al diseño. Como podéis observar en la foto todo es super colorido y llamativo!!

Las bolas de donuts son del restaurante del Palacio de los Inválidos... insuperables!!

Y bueno, os voy a recomendar dos sitios. Uno de ellos es una cafetería, Paul, es una franquicia pero la verdad que merece la pena. Comimos ahí un día y todo estaba buenísimo, desde los bocadillos hasta las palmeras, pasando por los macarons y la tarta tatin. El otro sitio es Du Bruit dans la Cuisine. Mi hotel estaba al lado de la estación de San Lázaro y dentro de ella hay comercios. Un día entre por casualidad y me encontré con este paraíso repostero. Tienen de todo, ingredientes gourmet, utensilios de cocina y por supuesto un montón de libros!! Libros de repostería francesa y libros de Nutella!! Yo me hice con unos cuantos... jajajajaj 

Algunas de las cosas que vi!!

Y ahora os dejo con la receta, crema catalana o para ser más parisinos, Creme Brulée. La receta es de Simone Ortega y aunque yo no tengo soplete de cocina quedo buenísima de todos modos.

Crema catalana (receta #1033 del libro de 1080 recetas de Simone Ortega)

Ingredientes (para 6 personas)

- 1 litro de leche (yo puse semidesnatada)

- 8 yemas de huevo (usé L)

- 10 cucharadas soperas de azúcar (6 para la crema y 4 para quemarla)

- La cáscara de un limón

- Una rama de canela (opcional)

- 1 cucharada y media o dos de maicena

Elaboración:

1. En un cazo ponemos la leche a hervir con 4 cucharadas de azúcar,  la rama de canela y la piel del limón.

2. Mientras tanto ponemos en un bol de cristal las 8 yemas con 2 cucharadas de azúcar y la maicena. Batimos bien hasta que esté todo integrado y sin grumos de maicena.

3. Cuando la leche empiece a hervir, es decir cuando salgan burbujitas en los bordes del cazo, cogemos una cucharada de leche y la vertemos despacio en la mezcla de yemas. Cuando esté disuelto, echamos esta mezcla en el cazo con la leche.

4. Bajamos un poco el fuego y damos vueltas sin parar con una cuchara de madera durante unos 5 minutos.

5. Cuando haya espesado, lo repartimos en una fuente individual o en cuenquitos individuales y dejamos enfriar al menos una hora en la nevera antes de consumir.

6. Cuando vayamos a servirla, espolvoreamos con azúcar la superficie y, con un soplete o una plancha de hierro al rojo vivo, quemamos la crema para que se forme el caramelo. Si como yo, no tenéis soplete, podéis precalentar el gratinador de vuestro horno y gratinar la crema durante unos 3-5 minutos, hasta que se funda el azúcar. Esto hay que hacerlo justo cuando se vaya a comer, si no se funde el caramelo con la crema.

Por último quiero felicitar a tooooodas las mamás del mundo y, en especial a la mía, ¡¡¡que es la mejor del mundo!!! Es la única persona que lo aguanta todo de mí y con la que he pasado los mejores y peores momentos de mi vida!! Mami juntas podemos con todo!!! 

Espero que hayáis pasado un finde estupendo, nos vemos dentro de nada, que el blog hace un añito y hay que celebrar!!! Un beso enorme!!

Esther :)

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